Extraterrestres dejan pruebas de su existencia antes de morir, ¿han encontrado alguna en la Tierra?
El fenómeno OVNI comenzó a cobrar fuerza en la década de los años 60, pues fue durante ese periodo que un equipo de astrofísicos que se empeñó en buscar vida extraterrestre por medio de la ciencia y fue ahí cuando surgió el SETI Institute, el cual aún existe hasta nuestros días y ha generado hipótesis interesantes, como el hecho de que los alienígenas dejan pruebas de su existencia antes de morir.
En el portal de SETI Institute se recalca que “la ciencia se acerca cada vez más a encontrar vida en otros mundos”. Los expertos que forman parte de esta organización siempre han sido criticados, pero el fundador del instituto, Frank Drake, logró el cometido de crear un grupo de expertos dedicados a la investigación de fenómenos ufológicos y han logrado algunos avances e hipótesis, aunque también han sido catalogadas como teorías conspirativas.
La teoría de las pruebas antes de la muerte
En los últimos tiempos, los científicos indicaron que la mayor parte de las señales alienígenas son por medio de frecuencias de radio. La explicación más común es que los sonidos son generados de manera natural por capar de gases que rodean a otros planetas, pero basados en esto, los expertos del SETI Institute sostienen que fácilmente la interpretaciones de datos llevan a conclusiones erróneas.
En muchas de estas ocasiones, los investigadores realizaban hipótesis ligadas a la existencia de vida extraterrestre inteligente, que se encontraban intentando ponerse en contacto con la Tierra; la mayoría resultó ser gases del cosmos, aunque aún hay algunas señales que no se han podido descifrar.
Drake tenía una explicación para aquellos acontecimientos, aseguraba que a partir de su ecuación, concluyó que lo más probable es que fueran mensajes de civilizaciones ya extintas, las cuales nos llegan a la Tierra como las reminiscencias milenarias de su actividad. Su hipótesis aún es vigente, pero desafortunadamente para su legado, aún no se ha podido comprobar científicamente.