JD Vance está dispuesto a llevar el trumpismo hacia el futuro

La elección de Vance como candidato a la vicepresidencia por parte de Trump podría hacer que el movimiento ‘Make America Great Again’ se extienda.

Cuando el senador JD Vance suba al escenario de la Convención Nacional Republicana en Milwaukee este miércoles, muchos seguidores del Partido Republicano lo verán como el nuevo heredero ungido del movimiento Make America Great Again (MAGA) de Donald Trump.

La elección de Trump de Vance, de 39 años y un populista fogoso, como su candidato a vicepresidente indicó que el expresidente, de 78 años, ve su movimiento MAGA como algo que podría extenderse más allá de su propio tiempo en el poder. Si Trump gana las elecciones presidenciales del 5 de noviembre, sólo podrá ejercer el cargo hasta 2029.

La tarea de Vance este miércoles y en los meses siguientes será tranquilizar a quienes dudan de sus credenciales MAGA sobre su buena fe y atraer a los votantes escépticos hacia Trump, que alguna vez lo compararon con Adolf Hitler antes de convertirse en un defensor incondicional de Trump.

Erick Erickson, un destacado comentarista conservador, cree que Vance, que alcanzó la fama nacional tras escribir unas memorias superventas, “Hillbilly Elegy”, puede encontrar la solución.

“J.D. Vance puede hablar de Trump a gente que no lo entiende”, dijo Erickson a Reuters en una entrevista. “Puede explicar su agenda”.

“Esa agenda MAGA es en gran medida, una forma laxa de populismo económico que se centra en la clase media y favorece una mayor participación del gobierno en la economía y busca evitar alianzas y enredos extranjeros”.

El movimiento MAGA en sí mismo es a la vez un ejercicio de marca mediática y un término multiusos para definir a los partidarios acérrimos de Trump. Entre ellos se incluyen aquellos que albergan profundos agravios raciales y muchos que siguen su ejemplo en cuestiones políticas independientemente de su posición en el espectro ideológico.

“En manos de Trump son sólo instintos e impulsos, algunos de los cuales surgen del agravio de los blancos”, dijo Damon Linker, profesor de ciencias políticas en la Universidad de Pensilvania. “Pero en la formulación de Vance, es mucho más grande que eso. O al menos él quiere que lo sea”.

Vance, un graduado de la Facultad de Derecho de Yale y ex capitalista de riesgo, ahora está bien posicionado para ayudar a moldear la visión a menudo dispersa de Trump en algo coherente para el futuro, aseguró.

Mientras que Trump a menudo trafica con frases simples pero memorables, Vance puede profundizar en los matices de política en foros conservadores y en entrevistas extensas con los medios.

“Él aporta una potencia intelectual a lo que sea que represente MAGA”, dijo Erickson.

Eso podría ser crucial porque el movimiento de Trump nunca ha sido ideológico, sino que se basó en los instintos del propio Trump, dijo Linker. Sin el sucesor adecuado, podría morir con él.

La pregunta para el movimiento de Trump en el futuro es si alguien con menos carisma que él, una ex estrella de reality show, “puede comunicar este mensaje de una manera que sea efectiva”, dijo Suzanne Schneider, una historiadora que estudia el conservadurismo en la Universidad de Oxford.

Los críticos de Trump tienen dudas y dicen que la fuerza de su celebridad y personalidad le ha dado una influencia que sería casi imposible de replicar para un posible sucesor.

Republicanos ven a J.D. Vance como un posible sucesor de Trump
Elegido para el Senado de los EU hace menos de dos años, Vance ha pasado gran parte de su breve carrera política argumentando que el gobierno necesita hacer más para ayudar a la clase trabajadora mediante la promoción de políticas que aumenten los salarios.

Esas políticas, según Vance, pueden adoptar la forma de limitar la inmigración ilegal, restringir las importaciones, aumentar el salario mínimo y tomar medidas enérgicas contra la generosidad corporativa: posiciones que no están completamente en línea con la ortodoxia republicana, pero que siguen de cerca la agenda MAGA de Trump.

El año pasado, Vance se asoció con la senadora demócrata Elizabeth Warren en una legislación que penalizaría a los ejecutivos bancarios cuando sus instituciones fracasen.

Algunos en la convención vieron la selección de Vance como una señal de que el movimiento MAGA ha avanzado hasta el punto en que Trump puede eventualmente pasar la posta a otros.

“Veo la elección de J.D. Vance como la continuación de las políticas de Donald Trump, de las políticas de Estados Unidos Primero”, dijo Chuck Hernández, presidente del Partido Republicano de Chicago. “Estamos en el punto en el que necesitábamos madurar y seguir adelante”.

Vance no está solo. Una nueva generación completa de acólitos de MAGA podría estar luchando por el poder y la influencia cuando Trump abandone el escenario.

Entre los posibles rivales se encuentran Vivek Ramaswamy, de 38 años, el empresario tecnológico que se postuló a la presidencia este año y disfrutó de un auge de popularidad entre la base de Trump, la gobernadora de Arkansas Sarah Sanders, de 41 años, que sirvió en la Casa Blanca de Trump como secretaria de prensa, y tal vez el hijo de Trump, Donald Trump Jr., de 46 años, que ha trabajado de manera constante para convertirse en un hacedor de reyes tras bambalinas en el partido y que apoyó firmemente a Vance.

“Hay todo un movimiento detrás de él lleno de gente que es más joven y más inteligente y que será mejor y más eficiente en el gobierno”, dijo Schneider.

Carla Sands, ex embajadora de Estados Unidos en Dinamarca y recaudadora de fondos para Trump que asistió a la convención como delegada de Pensilvania, dijo que el movimiento MAGA tendrá alcance más allá de Trump debido a su enfoque en la clase media.

“Los trabajadores de nuestro país han quedado rezagados durante los últimos 30 años”, afirmó Sands. “Los considero hombres y mujeres olvidados. Y este movimiento ya no los olvida”.